Recupera la firmeza con Radiofrecuencia

La radiofrecuencia es un tratamiento que aumenta la circulación de la zona tratada, mejorando así el aspecto de la piel. Uno de los beneficios más conocidos de la radiofrecuencia es que produce nuevo colágeno, de manera que la piel recupera la firmeza perdida de manera natural.

Se recomienda este tratamiento a personas que han sufrido cambios de peso recientemente o que, debido al paso del tiempo, han perdido firmeza en zonas localizadas.

La radiofrecuencia es perfecta para combinar con otros tratamientos y mejorar los resultados, normalmente se utiliza como un tratamiento de mantenimiento para mantener la piel hidratada y suave con un aspecto más joven.

La radiofrecuencia es el tratamiento ideal para:

  • combatir la celulitis.
  • disminuir el volumen.
  • reafirmar los tejidos.

¿En qué consiste este tratamiento?

La radiofrecuencia consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas que penetran en las capas más profundas de la piel activando los fibroblastos, la producción natural de colágeno y la circulación sanguínea.

Estamos ante un tratamiento no invasivo, indoloro y sin efectos secundarios.

¿Qué zonas se pueden tratar?

El tratamiento puede realizarse en cualquier zona, pero las más habituales son:

Glúteos, se recupera la forma redondeada y se eleva la zona gracias a la firmeza que aporta el tratamiento.

Piernas, se reduce la celulitis y el volumen de la cara anterior y posterior de la zona.

Abdomen, se consigue un vientre más plano y tras el embarazo se reduce la flacidez y las estrías.

Brazos, mejora el aspecto de la cara interna del brazo, zona que habitualmente pierde antes la firmeza.

También existe la radiofrecuencia facial, de la que ya os hablamos en su momento aquí.

La radiofrecuencia no tiene efectos secundarios

Lo único que pueden aparecer son rojeces en la zona tratada que desaparecerán en las horas siguientes al tratamiento.

Se recomienda no exponerse al sol los días siguientes al tratamiento o, en caso de hacerlo, utilizar una crema con factor de protección alto.

Este tratamiento está contraindicado en mujeres embarazadas, personas con marcapasos, arritmias u otra alteración cardiaca, pacientes oncológicos y con herpes u otras enfermedades estimuladas por calor.

Os mostramos un vídeo que hemos grabado en nuestro gabinete para demostraros que estamos ante un tratamiento nada molesto. ¿Qué? ¿Os animáis a probarlo?

Antes de someteros a un tratamiento de este tipo debéis acudir a un centro especializado con personal titulado como el nuestro para que puedan asesoraros y realizaros el tratamiento de forma segura.

Para cualquier duda no lo penséis y preguntadnos, estaremos encantadas de atenderos.